Doctor Nabor de Niz. |
Con el objetivo de explicar por qué es importante para los habitantes de nuestra región la expedición que zarpó del Puerto de la Navidad el 21 de noviembre de 1564 hacia las Filipinas, el capítulo Costa Sur de la Benemérita Sociedad de Geografía y Estadística del Estado de Jalisco organizó una gira de conferencias por algunos de los municipios de las regiones Costa Sur y Sierra de Amula, culminando este viernes 25 de octubre en el auditorio Hermilio Hernández de la Casa de la Cultura Efraín González Luna, de Autlán. Esta última conferencia, a cargo del doctor Nabor de Niz Domínguez y del maestro Jesús D. Medina García, contó con la asistencia de unas 100 personas, entre alumnos de la Escuela Preparatoria Regional de Autlán y de las secundarias Manuel López Cotilla y Jesús Velázquez Gómez, algunos representantes del Ayuntamiento y de la Secretaría de Cultura estatal. Comenzó a las 18:15 horas.
El doctor De Niz, coordinador del capítulo Costa Sur, dio la primera parte de la conferencia, haciendo una amplia explicación de los antecedentes del comercio entre regiones lejanas, aún entre las ubicadas en distintos continentes, comenzando con las grandes civilizaciones mediterráneas de la Antigüedad, que comenzaron a tener contactos con civilizaciones asiáticas. Habló también de los primeros contactos del mundo occidental con el oriental, de la Ruta de la Seda y los viajes de Marco Polo en la Edad Media, que permitieron a Europa conocer los productos orientales, escasos y difíciles de llevar a Occidente y, por lo tanto, sumamente valiosos.
Este valor de los productos asiáticos propició una demanda muy fuerte por ellos, que a su vez ocasionó el descubrimiento de nuevas rutas marítimas que permitieran llevarlos a Europa: las rutas portuguesas que costeaban África, las expediciones de Colón que descubrieron América por accidente, entre otras. El doctor habló del viaje de Magallanes y Elcano de 1520, que buscaba un camino a las Indias, una vez entendido que lo descubierto por Colón era un continente distinto y que dio por primera vez la vuelta al mundo. La expedición de Magallanes y Elcano descubrió que había una ruta marítima que permitía, viajando hacia el Occidente, llegar de España a las Indias Orientales, sin pasar por el Índico ni invadir las rutas portuguesas.
Como el regreso de Asia a Europa tenía que hacerse todavía por el Índico, puesto que no se conocía una ruta cuyas corrientes marinas y vientos permitieran viajar por el Pacífico hacia el oriente y llegar a la Nueva España de forma segura, el viaje seguía siendo riesgoso y caro para los españoles. En este contexto, el rey Felipe II ordena al virrey de la Nueva España, Luis de Velasco, organizar una expedición que buscara la ruta del tornaviaje, mediante la que se pudiera de forma directa llegar de las ahora llamadas islas Filipinas a las costas occidentales del virreinato. Velasco recurrió al marino Miguel López de Legazpi, quien puso como condición para capitanear la expedición ser acompañado como piloto por fray Andrés de Urdaneta, quien en su juventud había participado en una expedición a las Filipinas y había vivido 12 años en ellas, antes de volver a España. Urdaneta, quien había profesado como fraile agustino desde años antes, fue exclaustrado con permiso por escrito del papa y participó en los preparativos de la expedición, que comenzaron en 1560 en las actuales costas de Jalisco: en la laguna de Navidad se construyeron los cinco navíos que la componían, por carpinteros y demás trabajadores originarios de Purificación, Autlán y otras poblaciones de la región, mismas que proveyeron al personal que compondría las tribulaciones que zarparon en 1564 a Filipinas, que poblaron las ciudades españolas las islas y que regresaron al año siguiente a Nueva España, descubriendo la ruta del tornaviaje e inaugurando la ruta comercial del Galeón de Manila, que se mantuvo vigente por 250 años.
En el hecho de que fueran habitantes de nuestra región los operarios de la expedición y de que la ruta del Galeón hubiera permitido el intercambio comercial, cultural y étnico entre Asia, América y Europa, siendo nuestra región el primer punto de contacto entre estos tres mundos, radica precisamente la importancia que tiene este hecho histórico para nuestros municipios.
Maestro Jesús Medina. |
Enseguida el maestro Jesús Medina tuvo una breve intervención para comentar el programa académico con el que se va a conmemorar el aniversario de la expedición de Legazpi y Urdaneta el 21 y 22 de noviembre próximos, en Barra de Navidad y Cihuatlán. Sobre este programa, en el que se hablará de cuestiones gastronómicas, históricas y culturales por investigadores expertos en cada uno de los temas y provenientes de varias universidades e instituciones de la costa del Pacífico, dijo que se basa en dos ideas concretas: reactivar la Ruta Manila, que actualmente se limita a algunos señalamientos sobre la carretera federal 80, y crear en Barra de Navidad un museo interactivo y digital sobre la historia de esa región, que es desconocida incluso para sus habitantes. Dijo que debe quedar claro que los recursos turísticos se pueden desarrollar a partir de la historia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario