Justamente a las 20:00 horas, ya
con varias decenas de personas instaladas en los alrededores del kiosco,
comenzó la serenata bajo la dirección del maestro Jaime Gabino Gómez Acosta, con
un repertorio que incluyó marchas, pasodobles, danzones, son, cumbia, polka y
otros géneros. El programa abrió y cerró con piezas de compositores autlenses:
las marchas Viva Armería, de Jaime Gómez Vázquez, compuesta en los tiempos
en que este músico organizó la banda de música de Armería, Colima; y Viva
Autlán, de Clemente Amaya, estrenada hace más de cien años, al parecer en
este mismo jardín.
El programa completo de la
serenata fue el siguiente:
Viva Armería, de Jaime
Gómez.
Valencia, de José Padilla.
La leyenda del beso, de
Juan Vert y Reveriano Soutullo.
Por una mujer casada, de
Felipe Valdez Leal.
Musita, de Carlos Colorado.
El gato montés, de Manuel
Penella Moreno.
Corazón de Texas, de
Teodoro Bello.
Norma la de Guadalajara, de
Pérez Prado.
Nereidas, de Amador Pérez.
El mar, de Debussy.
Juan el Pescador, de
Emilio Domínguez.
El tecolotito, son tradicional.
España cañí, de Pascual
Marquina Narro.
Cumbia cale, de Domingo
Rullo.
Silverio, de Agustín Lara.
Viva Autlán, de Clemente Amaya.
En el intermedio de la serenata
el ballet folclórico Vive Jalisco ofreció una presentación, con grupos infantil
y mayor que mostraron estampas de Jalisco Ranchero, Veracruz y Sinaloa Costa.
Al presentar las diferentes piezas
la conductora compartía datos históricos tanto de la Banda Autlán como del
jardín Constitución, de músicos autlenses y de las serenatas que a lo largo del
tiempo se han desarrollado en el kiosco. La serenata de este domingo contó con
el patrocinio del restaurant Nápoles, tortas ahogadas El Trompo, la Cámara
Nacional de Comercio de Autlán y la funeraria Gómez, además del gobierno
municipal.
Esta nueva temporada, que
consistirá en diez serenatas dominicales y concluirá el 11 de junio, es una
iniciativa de La Banca, un grupo de amigos que desde hace años tienen la
costumbre de reunirse por las noches en una de las bancas del jardín
Constitución y han sido testigos de cómo ese espacio pasó de ser el punto de
reunión preferido de los autlenses en las noches de domingo a lucir
completamente solo. Decidieron poner un remedio a esto, dándole vida al jardín
organizando serenatas en el kiosco, una costumbre abandonada hace mucho por los
autlenses. Su primera serenata tuvo lugar el 30 de marzo de 2008, también con
la Banda Autlán, y se han seguido realizando por temporadas, con algunas
pausas.
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