domingo, 2 de febrero de 2020

Conferencia sobre zoonosis en el suroeste de Jalisco

Chinche hocicona. Foto de Secretaría de Salud federal tomada de aquí.

La mañana de este sábado 1 de febrero el capítulo Costa Sur de la Benemérita Sociedad de Geografía y Estadística del Estado de Jalisco celebró su sesión mensual ordinaria en la sala José Trinidad Lepe Preciado del centro cultural José Atanasio Monroy del CUCSur. Este mes la anfitriona de la sesión fue la doctora María Magdalena Ramírez Martínez, quien en el punto 11 del orden del día expuso el trabajo 1000 maneras de morir: zoonosis en el suroeste de Jalisco. La exposición comenzó a las 11:10 horas y se desarrolló ante unas 20 personas.
La doctora Ramírez abrió su intervención describiendo el término zoonosis, una enfermedad que puede ser transmitida de animales a humanos. Las zoonosis pueden ser transmitidas también de animales silvestres a mascotas, por lo que mencionó que todo lo que afecte a la fauna silvestre también puede afectar a los habitantes de las zonas urbanas.
Una forma importante de zoonosis son las enfermedades transmitidas por vectores, que pueden ser parásitos de otros animales que también podrían parasitar a humanos: garrapatas, pulgas, chinches y otros. Según la Organización Mundial de la Salud, dijo la expositora, en 2004 el 7.77% de las muertes por enfermedades infecciosas en el mundo se debieron a enfermedades transmitidas por vectores. Acerca del parasitismo, aclaró que es una de las formas de vida más antiguas y abundantes y no hay organismo alguno que se encuentre completamente libre de parásitos. De hecho, la presencia de parásitos puede usarse como indicador de la salud ambiental de un ecosistema.
Enseguida la doctora Magdalena Ramírez expuso tres de las anunciadas 1000 maneras de morir, de una forma didáctica y hasta divertida: la primera fue bautizada por ella como la muerte silenciosa y se refería a la enfermedad de Chagas. De ella mostró algunas descripciones antiguas de la enfermedad, que pudo ser la causa de muerte de Charles Darwin, la distribución de sus vectores (la chinche hocicona) en México y su distribución por municipios en el Estado de Jalisco, uno de los más afectados a nivel nacional. Dijo que desde 2011 se realiza un trabajo de investigación en el Centro Universitario de la Costa Sur, en colaboración con instituciones de México, Estados Unidos y Canadá, sobre la presencia de estos parásitos y la enfermedad en nuestra región, de la que se ha encontrado una prevalencia de 35.7% en murciélagos y 33.3% en ratones.
La segunda manera de morir es la comezón mortal, como se refirió la doctora a la leishmaniasis o enfermedad del chiclero, cuyo vector es una clase de mosquito. De fuerte presencia en el sureste de México, esta enfermedad causa deformaciones severas en los sitios donde pica el mosquito. La tercera manera de morir que conocimos fue la fiebre de amor... dida: con el dato de que se dan un millón de muertes al año por enfermedades vectoriales, pasamos a enterarnos de algunas particularidades de enfermedades de este tipo, causadas por hanta virus y virus del Nilo.
La exposición terminó con la recomendación de mantener a las mascotas al día con sus programas de vacunación y desparasitación para evitar que sean potenciales transmisores de enfermedades.

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