En el Aula Magna del centro cultural José Atanasio Monroy esta noche se llevó a cabo la cuarta gala de danza árabe organizada por la escuela Sarasuadi. Para presenciar este evento se reunieron aproximadamente 400 personas, muy poco menos de la capacidad total del recinto.
Dirigida por la maestra Angélica Sandoval Gómez, la escuela Sarasuadi tiene ya tres años de vida, cuenta con presentaciones en varios municipios de la región y está formado por cuatro grupos de bailarinas.
La velada de esta noche nos sirvió a los asistentes para conocer los detalles y la historia de manifestaciones culturales como la famosa danza del vientre y el uso de elementos como el velo, el bastón, el sable y hasta las monedas en las caderas de las bailarinas, que producen ese singular sonido al bailar, todo porque entre los diferentes números que ofrecieron se nos explicaba todo lo relacionado a lo que veíamos.
Sarasuadi no es simplemente un grupo que intenta bailar música exótica; su vestuario y caracterización es bastante profesional y el montaje de los diferentes cuadros se ve bien diseñado y trabajado, aunque hoy se vieron algunos leves errores de coordinación en algunas de las participantes. El grupo baila música contemporánea de los países del Magreb y el Medio Oriente (me pareció reconocer a Rachid Taha) que incluye, además de los sonidos tradicionales de la música árabe, beats electrónicos y ritmos pop.
En total el espectáculo duró dos horas, con participación de los cuatro grupos de la escuela. Con mucho, el número más llamativo fue donde se utilizaron las llamadas "alas de Isis" (en la foto de arriba), en buena parte por lo vistoso de este accesorio, aunque también por el dramatismo de la música y lo bien ejecutado del baile.
Además de lo presentado por Sarasuadi también se contó con la participación de la maestra Guadalupe Mendoza Estrada, con presentaciones en varios estados de la República, que participó con un cuadro de danza polinesia.
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