La tarde de este viernes en el salón de usos múltiples del Museo Regional y dentro del programa del ciclo de cine Los hermanos Rodríguez y su legado en la época dorada del cine mexicano, la nueva Orquesta Típica de Autlán tuvo su debut oficial, con un breve pero variado recital. El concierto comenzó a las 20:00 hrs. y fue presenciado por más de 100 personas.
Después de los agradecimientos y discursos protocolarios la orquesta comenzó su participación, dirigida por el maestro Víctor Ambriz, con el Tango Bolero de Juan Llosas y siguió con el Canon en Re mayor de Johann Pachelbel, misma pieza que ya habían ejecutado en su debut no oficial del 24 de mayo pasado. Hasta aquí todo iba muy tranquilo, con no muy entusiastas aplausos del público al terminar cada interpretación. Esta situación cambió en la segunda mitad del concierto, que consistió en dos piezas del compositor autlense Clemente Amaya: el vals Lencha, que fue aplaudido con energía al terminar y Viva Autlán, donde la emoción del público se manifestó con el acompañamiento de las palmas al ritmo de la marcha.
A mí nunca me había tocado escuchar a Clemente Amaya con orquesta y la experiencia fue muy satisfactoria. La imponente presencia de los metales, la alegría de la marimba y la delicadeza del piano y los violines le dan a su música un sonido distinto, mucho más completo que el que logran las bandas o los grupos de cámara con que generalmente se interpreta.
La orquesta todavía no está completa: además del salterio le faltan todavía algunas horas en la sala de ensayo. Sin embargo, este grupo de jóvenes (y no tan jóvenes) músicos de la región demostraron hoy tener el talento para colocar a la Orquesta Típica de Autlán en un lugar importante en la historia de la música en la región.
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