El jueves 15 de abril a las 13:00
horas, a través del canal de YouTube de la Facultad de Filosofía y Letras de la
Universidad Nacional Autónoma de México, el geógrafo autlense Hirineo Martínez
Barragán presentó para la comunidad del Colegio de Geografía de ese centro de
estudios su libro Teoría del conflicto, publicado en 2020. La presentación
contó con los comentarios de académicos de la Facultad, en el siguiente orden:
La doctora Mary Frances Ramírez,
directora de la Facultad, describió el libro como una lectura indispensable
para todo el gremio de geógrafos, que muestra una serie de aproximaciones
teóricas al tema, aunque sin quedarse en la parte teórica. Dijo que somos una
sociedad, incluso una especie, del conflicto, en especial tratándose de territorio,
y que el conflicto no se puede resolver sin entenderlo.
El doctor David Israel Alberto Herrera
Santana opinó, siguiendo a Michel Foucault, que un libro es una cuestión inacabada,
inserta en el debate de su autor, de su época y del futuro, de lo que Teoría
del conflicto es un buen ejemplo y abre la pauta para una discusión mayor. Entre
las fortalezas de la obra que se presentaba mencionó su lenguaje sencillo, que
atrapa y permite seguir leyendo, incluso a quienes no nos dedicamos a estudiar estas
disciplinas. Lo que más llamó su atención fue la noción del conflicto y que
muestra el nacimiento y modificación de las teorías sobre el conflicto desde
una perspectiva histórica. En el libro se muestran también los diferentes
enfoques desde los que se ha abordado el conflicto en la historia: desde su negación
hasta considerarlo como motor de la historia y el desarrollo de ideas para
desactivarlo o encauzarlo y no solo resolverlo.
Otro acierto que encontró el
doctor David Herrera en Teoría del conflicto fue la discusión de la geopolítica,
mediante la exposición de diferentes formas de abordarla. La obra, en su
opinión, abre un debate multiescalar: un conflicto geopolítico no se abre solo
en la escala mundial sino también a niveles locales o subnacionales.
El profesor Federico José Saracho
López calificó al libro como muy pertinente, con las ventajas de la amplitud
del público al que puede llegar y que toma varias líneas de debate, basadas en un
fundamento teórico pero también en la experiencia del autor. Costó mucho
trabajo seguir el discurso de este comentarista debido a los constantes
problemas técnicos que ocurrieron durante su intervención. Aún así, pudimos
escuchar su recomendación de leer el libro porque, en su opinión, es claro y
permite reencontrarse a los estudiosos de estos temas.
La doctora Patricia Gómez Rey, quien
también fungió como moderadora, hizo un análisis de los capítulos del libro.
Desde una visión docente, con constantes referencias a los materiales que están
al alcance de los estudiantes de Geografía, dijo que la obra es importante e
interesante porque de alguna manera se rompe con la geografía clásica, “relación
armoniosa sociedad-naturaleza”, y enseña que esta disciplina está en constantes
contradicciones que generan conflictos, que deben ser abordados. La obra, dijo,
está compuesta en buena parte por la experiencia del autor, quien es perito en
conflictos jurisdiccionales entre entidades y ha asesorado a gobiernos en
conflictos como Jalisco-Colima, Oaxaca-Chiapas y entre municipios.
El autor, doctor Hirineo Martínez
Barragán, afirmó que ha aprendido mucho con los diálogos alrededor de su libro
en las presentaciones que se han realizado, y pidió que circule libremente el
libro en formato pdf, entre los alumnos de los presentes. Narró enseguida parte
de su experiencia en el tema: comenzó a trabajar en conflictos jurisdiccionales
en 1990, en el litigio entre Jalisco y Colima. Recomendó humildad y apertura a
los estudiantes, puesto que el conocimiento es un proceso constante, en referencia
a su descubrimiento de la teoría del conflicto, por recomendación de su
director de la tesis de doctorado, Jaime Preciado, y que es un sustento teórico
que permite abordar de mejor forma el estudio de los conflictos.
El conflicto, dijo el doctor Hirineo, no es una
discusión entre buenos y malos, es un mundo de intereses que todos tenemos. Si aspiramos
a una geografía integral, sin adjetivos, el conflicto ayuda a tener una visión
integrada, puesto que es un sistema de intereses y de actores interactuantes.
